Por Martín Quevedo Rivera
El año 2008 el mundo de los superhéroes comenzó uno sus cambios más significativos. Como si de la llegada de Clark Kent a la tierra se tratara, se dio pie al Universo Cinematográfico de Marvel (MCU), con el lanzamiento de la película Iron Man.
Con este estreno, el cine vería a su nueva gallina de los huevos dorados. Año a año cada cinta arrastraba más y más fans y los héroes dejaban de ser solo para aquellos fans “ñoños” amantes de los cómics. De esta manera, Marvel lograba transversalidad y se volvía un infaltable para los amantes de las historias fantásticas.
El momento que demostró con claridad aquello fue la película Avengers: Endgame (2019), la cual daba un cierre a una seguidilla de historias vistas en la gran pantalla y se volvió la película más taquillera de la historia del séptimo arte.
Con aventuras coloridas, y bastante lindas, Marvel creó un patrón. Ahora los superhéroes deben ser chistosos y sin la oscuridad que en los 90’s habíamos visto con el Batman de Tim Burton o la serie animada del murciélago, pero manteniendo el tono familiar.
Los superhéroes de la gran pantalla, y las versiones de televisión como el arrow verse, se asemejaban a lo que se vivió en la era dorada de los cómics. Los héroes vivían pocos problemas internos, eran graciosos y se sentían mayormente con un tono infantil. Aunque entre medio existió el Batman de Cristopher Nolan, esto no fue más que una aguja en el pajar.
Quienes trataron de adaptar historias más adultas, quedaban en un público de nicho. No por nada el Spiderman de Tobey Maguire, el Batman de Tim Burton o los X-Men de los 2000 lograron mayor éxito con sus historias infantiles y/o juveniles, manteniendo la idea de que superhéroes eran algo simple.
El mismo año en que Avengers Endgame se estrenó, The Boys, de Amazon Prime Vide. Esta serie nos trae una nueva mirada de los superhéroes. Una historia que repite lo que inició un cómic en los años 80.
El año en que los héroes dejaron de ser infantiles
Los superhéroes durante años fueron vistos como un producto infantil. En sus inicios, las historietas eran un mundo para los niños puesto que eran fantásticas, coloridas y con poca profundidad, un símil a lo que por muchos años ha sucedido, en su mayoría, con el MCU.
Durante los 80’s, entre medio de los grandes blockbusters que estrenaba el cine, un par de escritores, que en su niñez habían vivido junto a los superhéroes, traían una nueva mirada al género con dos historias que llevaron a los héroes a mundos más oscuros y cínicos.
En 1986 Alan Moore, reconocido también por V for Vendetta y por escribir, y dar fama, a Swamp Thing, estrenaba tal vez uno de los cómics más importantes de la historia: Watchmen. Desde el miedo al doomsday clock, hasta el nacionalismo, que en su país representaba Margareth Thatcher y en las tierras del Tío Sam Richard Nixon, los personajes de esta historia se cuestionaban ¿Quién vigila a los vigilantes?
Antes de Invencible o The Boys, Moore llevó a los héroes a tierras oscuras. Los héroes de su historia vivían en un realista New York y eran moralmente complejos. A diferencia del “hombre de acero” que dejaba todo por el bien del mundo o un Batman con un gran valor por la justicia, estos protagonistas actuaban en los grises o directamente fuera de la ley.
Watchmen representó el cinismo de la sociedad, el caos que había dejado Vietnam y como, pese a ser prácticamente un dios como es Doctor Manhattan, los personajes estaban constantemente cuestionando sus actos.
Un nuevo Batman
Hubo otro escritor que, al igual que Moore, en 1986 cambiaría a la industria de los superhéroes. Frank Miller sería uno de los responsables de revolucionar a los míticos héroes.
Al igual que Moore, Miller venía de una carrera con éxitos; había escrito para Marvel, dándole relevancia y popularidad al personaje de Daredevil. Al igual que el escritor de Watchmen, este escribiría en DCpero, a diferencia de su colega, tomaba a uno de los personajes más famosos de las historietas: Batman.
Es tal vez inimaginable que el mismo personaje que había interpretado Adam West podía llevar el mismo manto que el personaje de este cómic. Si bien el murciélago siempre fue más oscuro que sus otros compañeros, nadie había llevado tan lejos al personaje como Miller.
Batman: Dark Night Returns fue el nombre del cómic estrenado en 1986 por Miller. La historia trataba sobre un ya viejo Bruce Wayne que, retirado de su labor como superhéroe, veía como la corrupción y los delitos se apoderaban de Ciudad Gótica, por lo que se ve obligado a volver a cuidar de los ciudadanos, pero esta vez más violento.
Si bien la historia no pareciera nada nuevo hoy, para esa época era algo nunca visto en las historias de este personaje. Este Bruce Wayne tenía problemas de alcoholismo, traía muchas heridas psicológicas del pasado e incluso, en una viñeta, nos daban a entender que asesinaba a su eterno enemigo. Al final, no por nada, aquella historia daría pie al Batman que hoy conocemos.
The Boys e Invencible
Lo logrado en los 80`s por Moore y Miller retumbaba en la industria de los comics. Las historietas avanzaron a tener historias más adultas e, incluso, la aparición de sellos como Vertigo, de DC cómics, o Image Comics, las cuales se dedicaron a realizar historias innovadoras.
En el 2019 Amazon Prime Vídeo dio en el clavo con una adaptación de superhéroes que, a diferencia de Marvel, buscaba salir de la fórmula familiar, y era un legado de la innovación de Moore y Miller.
The Boys, que adapta el cómic del mismo nombre, fue un éxito en la plataforma de streaming. Tomándose varias libertades en comparación a la historia original, la serie live action lleva a los superhéroes a un mundo oscuro, cínico y plagado de violencia.
Esta historia nos muestra qué pasaría si los héroes tan lindos que vemos en pantalla, vivieran en un universo donde las corporaciones los corrompieron, dándonos vigilantes sin interés en las vidas humanas, dándola más énfasis al éxito económico y fama, lo cual parece una burla a Marvel.
Luego de que estrenara una segunda temporada el 2020, y tener en producción una tercera, el 2021 otra gran historieta llegaría a revolucionar a los héroes de la pantalla.
Invencible, basada en el comic del mismo nombre, fue estrenada en la misma plataforma. Aquí nuevamente los superhéroes se alejaban de su mundo lindo y colorido. En esta ocasión los dramas de un adolescente en constante descubrimiento consigo mismo, dificultades familiares y secretos de un oscuro mundo superheroico, es la tónica de una historia plagada de violencia.
Si bien, todavía queda para saber si estas series cambiarán por completo el panorama de los superhéroes, ya que también tuvimos fracasos como El legado de Júpiter (Netflix) que quedó a medio camino de lograr lo de ambas series mencionadas, ambas historias de Amazon lograron no quedar solo en los fans de las historietas. Un logro que da para pensar que, tal vez, los héroes ya no serán solo de Marvel.